Los envases de plástico cumplen una función crucial en la estrategia de venta de todas las empresas que se dedican a la venta de productos tangibles.
Si bien para elegir la mejor solución de envasado es preciso considerar el tamaño, la usabilidad y la capacidad del recipiente, existe un aspecto adicional que no puede ser desestimado: el color.
En líneas generales, se recomienda elegir un tono que, además de estar en consonancia con el tipo de producto que contiene, sea coherente con la identidad de la marca.
A continuación, detallamos el rol que cumplen los colores en los embalajes de plástico y explicamos las ventajas de utilizar envases plásticos de color blanco, ámbar y transparente.
La elección del color adecuado para un envase de plástico es una decisión estratégica que puede marcar la diferencia en términos del éxito comercial de un producto, haciendo que destaque en el mercado.
En primer lugar, es fundamental entender cómo funciona la psicología del color, un campo de conocimiento que analiza cómo las personas perciben y reaccionan ante diferentes tonalidades.
Al momento de elegir un color para un envase de plástico se debe considerar las emociones que despierta ese tono. Por ejemplo, el blanco transmite pureza, pulcritud y paz, mientras que el ámbar evoca tranquilidad y calma, por eso se lo asocia a la naturaleza.
Por lo tanto, el color de los envases de plástico deberá estar en consonancia con el tipo de producto que contiene y sus propiedades, así como con los atributos que se desean asociar a él.
Asimismo, los colores que aparezcan en el recipiente deben guardar coherencia con la identidad visual de la marca. Solo así es posible crear una imagen memorable que impulse el reconocimiento de marca.
Finalmente, al elegir un color para un envase plástico también es importante observar los colores que las marcas competidoras utilizan. Recordá que si bien es necesario despegarse de ellas, utilizar un tono demasiado disruptivo puede confundir a los potenciales consumidores.
Es claro que la elección del color es una decisión estratégica que influye en la percepción del producto, así como en la conexión con los clientes.
En Microbottles, fabricamos envases blancos, ámbar y transparentes. A continuación, profundizamos sobre cada una de estas alternativas.
Este tono transmite una sensación de higiene y pureza, lo que lo torna ideal para productos que quieran destacar atributos como calidad, paz, pulcritud y tranquilidad.
Además, al ser neutro, el color blanco permite que destaquen otros elementos presentes en el envase, como texturas, así como etiquetas con gráficos, dibujos, tipografías y el logotipo de la marca.
Este color es un aliado clave para los productos que son sensibles a los rayos ultravioleta, como insumos químicos o medicamentos.
Los envases de plásticos que tienen esta tonalidad protegen al contenido de los rayos UV, impidiendo que se altere su composición.
Por otro lado, el ámbar suele asociarse con la exclusividad y lo natural. En este sentido, es un tono que transmite misterio y elegancia, así como calma, simplicidad y fiabilidad.
Los recipientes transparentes ofrecen total visibilidad del contenido, generando confianza en los consumidores.
Esto los convierte en una excelente alternativa para aquellas marcas que buscan construir relaciones cercanas con los clientes.
¿Aún no decidiste cuál es el mejor color para los envases plásticos de tus productos? ¡Podemos ayudarte! Mandanos un mensaje para que elijamos juntos la solución de envasado más conveniente para tu marca.